Los lagos en números

961

103

10

El grupo de trabajo viene realizando relevamientos geofísicos en los lagos de la Isla Grande de Tierra del Fuego desde el año 2000 y desde el año 2009 en lagos de la Patagonia, en estos últimos bajo el marco del proyecto de Gran Relevancia MAECI-MINCyT. Para  llevar a cabo los relevamientos el grupo cuenta con una embarcación tipo tracker y con equipo de sísmica de reflexión tipo Boomer, un Ecosonda Garmin EchoMap 62cv, una ecosonda EM2040P para los relevamiento batimétricos multihaz, y el sacatestigos KC-Denmark Kajak corer 13.030. Estos trabajos se han realizado en colaboración con Prefectura Naval Argentina (PNA), Administración de Parques Nacionales (APN) y actualmente a bordo de la embarcación Geoflama I, propiedad del grupo de trabajo. Hasta el momento se han relevado 961 km de líneas sísmica de reflexión y 103 km de batimetría monohaz en conjunto con la obtención de testigos de sedimento en los lagos Fagnano y Roca.

Tierra del Fuego

Santa Cruz

Generalidades

Los lagos patagónicos constituyen una gran reserva de agua dulce ocupando una superficie de 5782km2 (IGN). En su gran mayoría estos cuerpos lacustres se formaron como consecuencia del retroceso de las grandes masas de hielo que ocuparon nuestro país durante el Último Máximo Glaciar (UMG), denominándose lagos proglaciales. La presencia de dichos lagos en Argentina está vinculada al Campo de hielo  patagónico norte y sur, de gran interés por ser reservas estratégicas de agua, cumpliendo un rol fundamental como reguladores del sistema hidrológico (IANIGLA). Además, corresponden a ambientes poco alterados (baja energía) razón por la cual conservan los registros estratigráficos de ambientes continentales más continuos y de mayor resolución desde el Pleistoceno-Holoceno, siendo uno de los archivos geocronológicos más importantes para el análisis del cambio climático, que permite comprender procesos glaciales geológicos del pasado e interpretar procesos presentes y futuros. En las últimas décadas la gran mayoría de los glaciares que los conforman han sufrido una pérdida sostenida de masa y adelgazamiento. La Ley Nacional de Glaciares, sancionada en 2010, tiene como objetivo proteger los glaciares de nuestro país y el ambiente periglaciar, determinando como bienes de carácter público a estas grandes masas de hielo.